Circuitos culturales institucionales locales: un llamado a conversar sobre el mercado del arte.
“…como si estuviésemos en una transición desde la era del arte hacia otra cosa, cuya forma y estructura exacta aún se debe entender.”
Arthur Danto. (1)
Existe una relación afectiva ambivalente que habita en las relaciones entre
los circuitos culturales e institucionales y las prácticas artísticas. Por un
lado, el sociólogo Pierre Bourdieu y la artista Andrea Fraser exploran cómo
el campo artístico se rige también por estructuras afectivas que interiorizan
las reglas del juego de un centro dominante; y al mismo tiempo, se vive la
necesidad de activar la reflexión en torno a la práctica artística local, sus
públicos, sus afectividades, valores y aspiraciones.
No se trata de escapar de las instituciones, sino de buscar cuáles son los
valores que los mecanismos culturales locales institucionalizan, cómo se
auto censuran y generan complicidades, para esto es necesario conocer el
estado de las cosas y ejercer un pensamiento crítico frente al contexto
cultural local, la formación de identidades y la crítica institucional.
Hay que tener presente que los circuitos artísticos actuales son
ideológicos-comunicativos y mercantiles; y están constituidos, ya no solo
por el artista, la obra de arte y el público. Ahora es primordial, además de
considerar al crítico y al curador también considerar que el diseño, la
publicidad y los medios de comunicación masiva son tan esenciales como
los museos, ferias de arte, exposiciones, festivales y galerías. Esta red de
instituciones son cruciales como mediación entre el arte y el público,
legitimando y cerrando el circuito. (2)
Por otro lado, también propongo revisar lo que el filósofo italiano Giorgio
Agamben formula como lo contemporáneo: “el contemporáneo, es aquel